siento que, en la medida que siga confiando, mostraré más y más de mí, ¿a dónde me llevará eso?, ¿a que otra persona maravillosa se decepcione de lo que soy?, error, porque nadie debería tener expectativas ni idealizaciones, pero yo… yo me vivo tan insuficiente, llena de fallas, tan no maravillosa…
¿por qué?
estoy aterrada: martes 21 de febrero, 23:33 hrs.
anotaré que hoy sentí demasiada intimidad, siento que mostré cosas, dije cosas, compartí cosas, ¿para qué? demasiado de mí… ya escribí demasiado… ¿acaso me da miedo la abundancia?
de donde yo vengo, nada es estable, todo es impredecible
el amor que me dieron fue tan intermitente, una y otra vez el dolor por el rechazo, el abandono, por las palabras innecesarias… hirientes
siento mucho, hoy conecté demasiado, hoy sentí demasiada paz… y el miedo a perderla me aterra… ¡maldito miedo! pareces el lunar imposible de eliminar con láser
¿de dónde viene este ímpetu maquiavélico de querer compartir todo contigo?
me gusta platicar con él, me gusta escucharlo, me intrigan sus ideas, opiniones, sus pensamientos más abstractos…
me gusta abrazarlo, como huele, cuando sonríe, los hoyuelos en sus mejillas, la forma de sus cejas, su perfil contraluz cuando maneja, y como me bromea
me gusta la idea de poder construir momentos con él, me gusta… quiero verlo más, sentirlo más, conocerlo más…
estoy aterrada: martes 21 de febrero, 23:44 hrs.
he pasado el último par de años tratando de comprender por qué actúo así, por qué proceso así mis emociones, y -según yo- de esta manera podré solucionarlo
eso me remite a la niñez, ¡oh etapa fantasiosa!, no recuerdo el momento exacto, pero sentí un dolor inconmensurable al descubrirme «imperfecta» asociando al «no ser amada»
un amor superficial, una presencia ausente, nada de mí pareció suficiente, todo resultó mi culpa… ¿por qué me aterra ser conocida?, ¿por qué temo ser feliz?, ¿por qué me cuesta creer en mí?
sé las respuestas, elaboré estas hipótesis una y otra vez, hallé enfoques, divergencias, ¿acaso eso me ayuda ahora?
escribo, sigo escribiendo, pienso y siento al tiempo que aprieto tecla por tecla a velocidades dignas de cuento
¿es mi única forma de expresión o es realmente la manera que ordeno el caos de mi cabeza?
mi memoria… ¿selectiva?, ¿o evitativa?
estoy llorando: martes 21 de febrero, 23:51 hrs
pero, queride lectore, lectora, lector, mis lágrimas no denotan tragedia ni connotan tristeza, simplemente es mi cuerpo buscando libertad (o liberación), porque siento mucho
y estoy sintiendo mucha conexión, muchas ganas de compartir, muchas ganas de que sea él.
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